A partir de mañana los centros educativos en la provincia de Granada seguirán abiertos, hasta ahí, normal, pero cierran las cafeterías de los mismos, a partir de ahí, paranormal.
Entre las exclusiones al cierre que se recogen en el BOJA figuran:
3.º Los servicios de restauración integrados en centros y servicios sanitarios, sociosanitarios y sociales, los comedores escolares y los servicios de comedor de carácter social.
4.º Otros servicios de restauración de centros de formación no incluidos en el párrafo anterior, y los servicios de restauración de los centros de trabajo destinados a las personas trabajadoras.
Pues parece que da igual lo que diga el BOJA, el "iluminao" de turno ha decidido que currar si, pero que desayunar no.
La pena, es que no nos gobiernan imbéciles y, la desgracia, es que nos gobiernan aprendices de imbéciles.