Llevan a la Fiscalía «anomalías» en la residencia de ancianos de la Junta El Colegio de Enfermería denuncia «indefensión e inseguridad» en el centro
NURIA PÉREZ / DOS HERMANAS
Día 17/06/2011 comentariosEl Colegio de Enfermería de Sevilla ha elevado a la Fiscalía las «anomalías»que, según dicen, vienen sucediéndose en la residencia para personas mayores de Montequinto, instalada en la Autovía Sevilla-Utrera a su paso por Dos Hermanas, y cuya titular es la Consejería para la Igualdad y Bienestar Social de la Junta de Andalucía.
El escrito de denuncia, también ha sido remitido al Defensor del Pueblo y al que ha tenido acceso ABC, advierte que en el centro, gestionado como «residencia abierta», hay un control «insuficiente y deficiente» de entradas y salidas tanto de enfermos como de visitas lo que crea «situaciones de auténtica inseguridad» para el personal y residentes. Aseguran así que la cancela de acceso del complejo permanece abierta durante «largos» periodos de tiempo «sin vigilancia alguna» lo que ha motivado que, en ocasiones, «se haya tenido que recoger a residentes demenciados fuera del recinto».
Las salidas de las cuatro plantas de la residencia —el sistema de evacuación es por escaleras— han permanecido, según denuncian, hasta el día de hoy, «cerradas con cadenas» como «una auténtica ratonera en caso de incendio u otro siniestro».
A los fallos de seguridad se suma la falta del personal Desde el Colegio de Enfermería recuerdan que en la residencia están ingresados más de 200 pacientes que, bien por su deficiencia física o psíquica, requieren atención y asistencia «continuada y vigilante». Sin embargo, sostienen que el centro solo cuenta con presencia médica y de coordinación de 8 a 15 horas en días laborales, careciendo de trabajadores sociales los días festivos, la mayoría de las tardes y noches. En este sentido, añaden que la dirección del centro suele estar presente sólo en días laborales y en turno de mañana pese a tener «dedicación exclusiva». El escrito detalla además la falta de protocolos de actuaciones ante situaciones «médicas y sociales» y de cumplimiento de la ley antitabaco. «Se fuma en los despachos y hay residentes diagnosticados de esquizofrenia que fuman, incluso, en sus habitaciones y que tienen mecheros en su poder», precisaron.
Critican igualmente que el mobiliario de enfermería «no es funcional» y que gran parte de las historias médicas de los ingresados «no están en el lugar habilitado para ello».
La mayoría de los tratamientos a aplicar a los pacientes «o no constan en las correspondientes hojas de tratamientos o no están firmadas o escritas con lápiz» originándose «una situación de inseguridad legal» para el personal de enfermería «en caso de consecuencia no deseadas por la aplicación de los tratamientos y no poder contar con el correspondiente respaldo documental». «En los casos —añaden— de caída de un residente, se nos obliga a valorar y diagnosticar además de tener que firmar los correspondientes partes aunque no hayamos presenciado el incidente».
La situación, dicen, está provocando un «deterioro» en las relaciones interprofesionales. De hecho, a día de hoy, son ya dos las denuncias presentadas en los juzgados por enfermeros a un facultativo por amenazas, menosprecio y falta de respeto profesional.
Por su parte, fuentes de la delegación provincial de Bienestar Social dijeron no haber recibido escrito de queja alguno de manera oficial, si bien subrayaron que, fruto de la comunicación «fluida» entre la administración y los trabajadores, las incidencias que van surgiendo «día a día», se han ido solucionando.
http://www.abcdesevilla.es/20110617/sev ... 10617.html