CRÍTICAS DE LA OPOSICIÓN
Por su parte tanto el PP como IU criticaron que se haya aprobado este plan como decreto ley y que no se haya aceptado tramitarlo como proyecto de ley y además consideraron que con esa reordenación "se suprimirán las convocatorias de las ofertas de empleo público".
La diputada del PP María Teresa Ruiz-Sillero, quien advirtió del crecimiento en los últimos años del número de entes instrumentales y pidió "claridad" en el proceso, consideró que este plan introduce "muchas incógnitas" y criticó que se haya aprobado "con nocturnidad" al no tramitarse como proyecto de ley.
Recordó que los funcionarios "están en pie de guerra, ya que se le restringen derechos" y lamentó que "se equiparen a los desiguales, lo cual a su vez supone un gran desigualdad".
También lamentó que se "finiquiten 'de facto' las convocatorias públicas de empleo" y consideró que este plan "supone un baile de sillas, con cambios de sillones y puestos entre los altos cargos".
Por su parte, el diputado de IU Pedro Vaquero aplaudió que se acometa una racionalización, pero criticó que se haya acometido "de forma abrupta, con una premura e improvisación" fruto de que "está obligado por el recorte del déficit, algo impuesto desde Madrid, es una medida inducida".
Consideró que dicha premura "puede impedir los otros objetivos de mejorar el servicio público" y tras insistir en que "hubiera estado mejor una reforma exenta de esas presiones externas", aunque cree que la reforma "es necesaria para evitar duplicidades, externalización y cierto clientelismo en la Junta".
Lamentó que la reforma "se ha hecho mediante decreto ley y sin participación de sindicatos ni de los partidos de este Parlamento", por lo que consideró que "lo mejor es que se derogara ese decreto ley y se llevara a cabo como proyecto de ley" y aunque destacó que la consejera "haya dado tranquilidad a todos, pero no da tranquilidad a los opositores ni a los interinos, que se van a quedar colgados, ya que no va a haber plazas para ellos se congela la oferta de empleo público".
Vaquero expresó sus dudas de que en este "proceso de locura" puedan existir "garantías de participación, toda vez que no hay tiempo para que participen los agentes afectados".
AHÍ VA ESO.
STRONG.